viernes, 11 de marzo de 2016

LA OTRA GUERRA (KRIGEN) de Tobías Lindholm


EL GRAN DILEMA: LEGALIDAD VS. SEGURIDAD

El cine danés es como si siempre hubiera estado entre las sombras del cine alemán y del cine sueco. En mucho años no habíamos conocido otras películas que "La Fiesta de Babette" y "Pelle, El Conquistador", hasta que los jóvenes directores daneses de la mano de Thomas Vinterberg y Lars Von Trier  firman el nuevo Dogma Danés donde afirman que es imposible competir contra el cine americano, su capacidad financiera y tecnológica si no era haciendo hincapié en 3 aspectos fundamentales de la producción: 1) la elección de un buen tema, 2) redactar un buen guión que lo desarrolle, y 3) aprovechar todas las capacidades creativas de los grandes actores daneses. Ha sido un camino largo y sinuoso. Pero en lo últimos años, cada vez más películas danesas han llegado a nuestras pantallas. Von Trier ha ganado la Palma de Oro en Cannes 2000 con "Bailarina en la Oscuridad" y la televisión danesa ha generado joyas como Borgen (2010), sobre la carrera politica de una Primer Ministro, y la miniserie policial "Forbrydelser", cuya estupenda remake (The Killing) ha realizado la televisión americana.

Tal vez el cine danés ya ha abandonado el dogma. Pero no hay dudas que los tres principios fundamentales del mismo han calado hondo en los nuevos directores. Ahora nos llega "La Otra Guerra", un film de Tobiás Lindholm, un joven escritor y director, cuyos primeros trabajos fueron realizados para la televisión de su país, la que le abrió la posibilidad de llegar al cine. Conocido en Argentina  como autor  del guión de Submarino (2010) y La Caza (2012), ambas dirigidas por Thomas Vinterberg, también escribió en 2010 para la televisión de su país 8 episodios de la famosa serie "Borgen" en la cual relata el comienzo, el apogeo y la decadencia de la carrera política de una mujer que aspira ser Primer Ministro de su país.  Su carrera cinematográfica cuenta con 3 largos y un documental, no conocidos en Argentina.

No obstante, con lo que hemos podido ver de su obra, podemos decir que no solo es un muy director, sino también que hay formas y temas que lo preocupan. "La Otra Guerra" es una película de atmosferas opresivas. En una primera visión, el tema es el desamparo. Estamos en plena guerra de Afganistán. Una patrulla militar danesa, que forma parte de las fuerzas de paz de la ONU controla una pequeña aldea que está cercada por el conflicto. No solo están desamparado los pobres habitantes del lugar  respecto de los ataques talibanes en la región, sino también están desamparadas las fuerzas de paz, e incluso, hay un tercer desamparo, el de las propias familias de los militares que prestan servicio, quienes han quedado a su espera en sus países de origen.

Desamparo para aquellos civiles que pretenden vivir en paz pero cuyas tierras son tomadas como campo de batalla por los grupos terroristas y fundamentalistas que los conducen hacia una irremediable guerra civil. Pero también hay desamparo para aquellos soldados que cumplen tareas de paz. Ellos no son vistos como neutrales en el conflicto, sino como parte. Nadie queda ajeno al conflicto en medio del conflicto. Por otro lado, hay estatutos y códigos de guerra que cumplir. Y cualquier equivocación, error, puede conducir a la violación de las normas establecidas. Finalmente, el desamparo de las familias de los militares. Allí quedan madres que tienen que cumplir con los dos roles, madre y padre al mismo tiempo, dado que sus pequeños hijos reclaman padres ausentes que no siempre se tiene la certeza que algún día volverán. La situación que la pelicula plantea es la de una absurdo inexplicable.

La primera parte del film transcurre en Afganistán y remite a Vietnam. El propio director reconoce influencias de "El Francotirador" de Michel Cimino. Pero también las hay de "Apocalipsis Now" de Francis Ford Coppola, y más cercana aún, la estupenda última película de Clint Eastwood que vimos el  año pasado "American Sniper". En estas dos prima la atmosfera de extrañeza, el ámbito hostil e inentendible. En la de Eastwood, además,  la de una amenaza permanente, un enemigo invisible. Pero esa invisibilidad se hace aún más peligrosa porque existen reglas escritas que demarcan un accionar que está determinado por la improvisación y la acción sorpresa. Es allí donde la pelicula comienza a deslizarse en dirección de otros films, a los cuales, rinde tributo: "King and Country (1964) de Joseph Losey,  y "Path of Glory" (1957) de Stanley Kubrick.

Es muy interesante el trabajo de Lindholm en el cual recorre caminos que llevan de la impersonalización de los soldados a la humanización de los mismos, de la anonimidad a la identificación. El grupo va derivando de lo estrictamente operativo hacia el conjunto de individuos que tienen un país, una vida, y una familia más allá de la guerra. Para eso pasa de planos generales a escenas cámara en mano en la mayoría de las escenas bélicas, y para ello cuenta con actores excepcionales como  Pilou Asbaek como El Comandante Claus Pedersen, Tuva Notny como su esposa y Soren Mailing como el abogado Martin Olsen.


De las películas candidatas al Oscar al Mejor Film Extranjero del presente año, "La Otra Guerra" es la que más me gustó. No tiene la perfección de "El Hijo de Saul", ni la grandiosidad de "El Abrazo de la Serpiente". Y es muy superior a "Mustang" y a la decepcionante nueva pelicula de Sorrentino: "Juventud". Pero tiene la capacidad de plantear conflictos humanos de permanente actualidad: Lo absurdo de la guerra, preguntarse qué hacen soldados daneses en Afganistán más allá de formar parte de las fuerzas de paz. Qué hacen "las fuerzas de paz"?  De qué paz se habla cuando los unos y los otros tienen argumentos razonables que lamentablemente intentan imponer por la fuerza? También cabe preguntarse qué paz puede haber en medio de la guerra? En el film hay dualidades permanentes: La coexistencia de dos mundos, dos familias (la propia y la militar), dos responsabilidades limitados por los afectos, la añoranza, el sentido de grupo, los errores de mando,  el marco legal, la debilidad de lo humano respecto de fuerza de lo legal, la delgada línea separadora de la legalidad en relación al  mayúsculo peso de la moral. Existen posiciones éticas en una guerra? Corresponde que militares con familia estén siendo enviados a formar parte de un cuerpo de paz donde lo que menos se respeta es la paz? Cuál es la decisión correcta? Cómo logramos mantener un equilibrio entre el respeto de la legalidad y el imperio de la seguridad?  "La Otra guerra", el notable film del danés Tobías Lindholm se debate dentro del amplio marco de estos dilemas eternos, casi sin solución, muchos de ellos, reservados al fuero íntimo de cada persona.

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